Riego por Aspersión
Actualmente se han añadido varias mejoras en los emisores:
Sistemas convencionales:
Estos sistemas son los primeros que se desarrollaron en el riego por aspersión. Se dividen a su vez en:
• Sistemas fijos: se colocan los aspersores en el marco establecido, y el sistema de tuberías puede ser enterrado o bien superficial, quedando como parte saliente y con la altura adecuada el vástago donde irá incorporado el aspersor.
• Sistemas Semifijos: son esencialmente sistemas que se van desplazando de una zona a otra de forma manual o mecanizada mediante un desmontaje rápido del sistema. Dentro de estos sistemas se encuentran las alas de riego y los cañones de riego.
Sistemas automecanizados:
Son sistemas automotrices que llevan instalados motores eléctricos o sistemas hidráulicos que permiten su movimiento a lo largo de la superficie de riego. Dentro de estos sistemas se encuentran los sistemas pivotantes de riego, los sistemas de desplazamiento lateral (carros de riego) y otras máquinas regadoras.
La elección de un sistema u otro se establece según los criterios técnico-económicos que permiten o no su instalación, como son la superficie a regar, la orografía del terreno, el acceso a la electricidad en la finca, etc.
El uso de sistemas de irrigación por goteo está muy extendido en cultivos extensivos (cereales, forrajes, patata, remolacha, etc.) y hortícolas. Se utiliza en terrenos con orografía irregular, donde los recursos hídricos son abundantes.
Ventajas de la aspersión
- Tiene un menor consumo de agua que los sistemas de riego por inundación.
- Presenta una gran adaptabilidad a terrenos irregulares, con grandes diferencias de cota en su superficie.
- Permite dosificar el agua con una buena precisión.
- Su distribución sobre el material vegetal depende del viento, aunque a bajas velocidades es muy homogénea.
- Es utilizado para la aplicación de riego antihelada y la aplicación de fitohormonas.
